martes, 15 de marzo de 2011
Palabras de la Presidenta en Comodoro Rivadavia
Muchas gracias. Muy buenas tardes a todos y a todas.
Señor presidente de la cooperativa; señores gobernadores de la provincia de Santa Cruz y de la provincia de Buenos Aires; señor Intendente de Puerto Madryn; a todos los amigos, a las amigas, a los compañeros: quiero decirles que otra vez en Comodoro, como siempre.
Yo sostengo que los pibes últimamente tienen telepatía conmigo, porque quería contarles que recién cuando venía del Aeropuerto, venía recorriendo las calles, la entrada a Comodoro, ese camino que transitamos con él cientos y cientos de veces, me acordaba de viejas historias de cuando ni siquiera era intendente de Río Gallegos, antes, cuando éramos lo que fuimos toda la vida y lo que vamos a seguir siendo siempre, militantes. Me acuerdo que para venir a Caleta Olivia veníamos a Comodoro, para venir a Comodoro siempre con mucho cariño y con mucho afecto. Es que en realidad, Caleta-Comodoro, Comodoro-Caleta es lo mismo, no hay diferencia.
Después, cuando fue gobernador y después cuando llegó a presidente y todas y cada una de las veces que hemos venido aquí, hemos venido con la mano tendida, hemos venido, primero con las ideas porque no teníamos otra cosa, luego con la gestión, con las obras para llegar a todos y cada uno de los rincones de la República, una gestión que él inició un 25 de mayo del año 2003 y que nunca puso distingos, al contrario, siempre pensando en su Patagonia.
Claro que sí, somos y seremos pingüinos, bien pingüinos, como ellos, sufridos, como ellos, trabajadores, viniendo de aquí para allá y como ellos también creyendo únicamente en los proyectos colectivos y no meramente en los proyectos individuales, porque no creemos.
Yo lo decía anoche en Huracán, fuera y lejos de las vanidades personales, fuera de los egoísmos, esos proyectos que sólo llevan al fracaso porque dividen fuerzas donde debieran estar unidos y, además, porque fundamentalmente, creo que hemos dado más que muestras suficientes de qué es lo que queremos para nuestro pueblo, para nuestra gente, para nuestras provincias, un verdadero federalismo, una gestión que siempre ha puesto por sobre todas las cosas el interés del pueblo adelante y que por eso ha recibido muchos ataques.
Nunca vinimos aquí a hablar mal de nadie. Al contrario, cada vez que él vino, vino a hacer cosas por Chubut, por Comodoro, por Puerto Madryn, por Trelew, por Rawson.
Díganme si alguna vez lo recordaron viniendo aquí a sembrar o separación o discordia; al contrario, siempre a brindarse como era él, abierto y también yo, con mis limitaciones, con mis defectos pero siempre ayudando y siempre colaborando sin pedir nada a cambio, porque no considero que la política pueda ser objeto de trueque y cambio.
La verdad que no importan las gracias o el reconocimiento, yo se los agradezco de corazón ¿pero saben qué es lo que me importa? Que estoy segura que ustedes viven bastante mejor que en el 2003 y con eso me alcanza y ese era su objetivo, que lo mismo que había hecho allá, pudiera derramarlo y ejercitarlo en todo el país.
Por eso inició una gestión que permitió que florecieran nuestras provincias, que esa coparticipación chiquitita que recibíamos las provincias, miserias, lo recordamos muy bien, en el año 2003 se multiplicaba exponencialmente. Fue lo que permitió que se hicieran obras, acueductos, autovías, viviendas, escuelas a lo largo y a lo ancho del país, también aquí, ¡qué les voy a contar! Ustedes lo saben mejor que yo, si lo saben, si en el proyecto político que gobernó durante décadas en el país la electricidad se cortaba en Choele-Choel, al sur de la provincia de Buenos Aires y hoy estamos llegando a la punta de la Patagonia. ¡Cómo no van a saberlo ustedes!, con el gasoducto del oeste cordillerano, con la autovía Puerto Madryn-Trelew, la que estamos construyendo a Caleta, como todo lo que hemos hecho. Esto que se ha hecho en Chubut uno lo puede encontrar en todas y cada una de las provincias argentinas. Y déjenme decirles que no hubo proyecto más federal que este que se inició el 25 de mayo de 2003.
¡Vamos con Cholila, la linda Cholila, con Esquel, los pueblos de la cordillera, los de la costa! Con este turismo que ha vuelto y que encuentra aquí también en Chubut un crecimiento exponencial en su industria hotelera.
Decime "Ganzo" como estaba Puerto Madryn en el 2003 y contános cómo está ahora.
Vos, "Tano", acordate la lágrima que era Comodoro en el 2003 y mira a la Comodoro de hoy, pujante y rebozante. Una de las mayores inversiones y crecimiento de empresas emblemáticas como el aluminio donde el Estado puso en promoción a las inversiones más de 700 millones de pesos para aumentar la producción del aluminio, incorporar más gente, con obras de electricidad. También con Asignación Universal por Hijo que vino a cubrir cosas que aún faltan.
¿Saben cuál va a ser el día que más realizada me voy a sentir? El día que no tengamos que pagar ninguna asignación universal por desempleo, que todas sean asignaciones universales por trabajo. Pero en el mientras tanto, necesitamos el rol del Estado que es indiscutible e insustituible.
Con esta educación, hoy no hay una sola provincia argentina que no tenga una universidad. Nueve universidades hemos creado en el 2007 a la fecha para miles de pibes. Y si hay un lugar en que sabemos la necesidad de esto, es aquí en la Patagonia, donde muchas veces por las inmensas distancias los padres no podían mandar a sus hijos a estudiar. Ni qué hablar de lo que ha significado el modelo en sus variables macroeconómicas con el dólar competitivo que hoy hace rentable la inversión; inversión extrajera que viene porque hay variables macroeconómicas y un Estado nacional que la mantiene, si no, no vendrían, porque el petróleo siempre estuvo, pero no estaban las condiciones económicas para tornar rentable la inversión.
Por eso yo hablo de proyecto colectivo, por eso yo hablo de proyecto nacional, popular y democrático. Porque era necesario tener un proyecto de país, una visión macro para poder llegar a diseñar políticas activas y fundamentalmente poder llegar a todos desde los convenios colectivos de trabajo. Lo deben recordar los compañeros trabajadores de Comodoro Rivadavia cómo han mejorado las condiciones y que también estamos a punto -están, porque yo no soy empresaria ni trabajadora petrolera- de firmar también convenio colectivo que venía desarrollándose desde hace mucho tiempo. Los felicito por el compromiso. Todo esto lo hemos podido hacer, porque hubo alguien que se atrevió.
Sí, Néstor, él.
Cuando le decían que estaba loco con lo que estaba haciendo en la renegociación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional o con el ALCA, cuando pretendieron meternos en ese verdadero estatuto del coloniaje que hubiera sido en el año 2005; cuando promovía el desarrollo del mercado interno por sobre todas las cosas para asegurarnos de los vendavales externos, pero al mismo tiempo asegurando condiciones dignas, más de 1.800 convenios colectivos de trabajo, nuestros jubilados, en el 2003, 150 mugrientos pesos ganaban nuestros jubilados, los que tenían la suerte de tener una jubilación, porque había millones que se habían caído. Porque había millones y ustedes lo saben mejor que yo y mejor que nadie aquí. Fueron millones nuestros jubilados que se incorporaron al sistema previsional, y que hoy están en una jubilación que jamás hubiéramos pensado que podíamos darle allá en el 2003.
La ciencia y la tecnología, como me apuntan acá los jóvenes, ¡cómo me gustan los jóvenes y cómo me gusta la ciencia y tecnología! Van unidos de la mano. Por eso, hemos retornado al país más de 800 científicos.
Quiero contarles algo: la número 800 es una joven argentina con la que estuve en Berlín cuando fui la última vez a Alemania, ya casada con un alemán y me dijo: "Me parece que me estoy por volver a la Argentina". "¿Ah, sí -le digo- y sos soltera, casada?" "No, estoy casada con un alemán". "¿Y con el alemán qué vas a hacer?" "Me parece que me lo llevo también" dijo.
Y vinieron la argentina científica con el alemán también científico. Ella es la número 800, el alemán debe ser el número 801 pero no repatriado.
Ochocientos millones de pesos era todo el presupuesto que tenía Ciencia y Tecnología en el año 2003; más de 5.000 millones en el año 2010 y este año vamos a tener mucho más aún inaugurando el Polo Científico Tecnológico en las ex bodegas Giol, donde vamos a agrupar allí a los científicos del CONICET.
Nuestras universidades: acabo de inaugurar una facultad, la de Ciencias Económicas de la UBA, la primera -lo contaba ayer en Huracán- la inauguró Perón en los años '50 y la segunda la inauguramos nosotros, el Gobierno y el movimiento político que decretó en el '49 la gratuidad de la enseñanza universitaria pública.
¡Cuántas cosas! ¿Será por eso que no hablamos mal de los demás? ¡Porque tenemos tantas cosas para contar de las que hicimos, tantas cosas!
Y los jóvenes, esos jóvenes en los que tengo tantas esperanzas, porque estamos construyendo un país diferente, un país que no sea como el que nos tocó vivir a nosotros cuando éramos jóvenes, Néstor, yo, cuando nos conocimos allá en La Plata, donde luchábamos para que Perón volviera y junto con Perón volviera la democracia. Parece que algunos quieren cambiar las cosas y contar otras historias, pero la historia es esa. Podrán darle vuelta, podrán querer encontrarle atajos, pero lo cierto...
Les quiero contar algo: el otro día, Rocío, la novia de Máximo, me trajo una foto de Río Gallegos del año '72. Che, que Máximo se va a enojar, no se hagan los vivos. Y estaba...¿Sabés Daniel quién estaba? El abuelo de ella que era presidente del Partido Justicialista del distrito, Santa Cruz, porque ni siquiera éramos provincia, éramos distrito, Marcelino, Marcelino García y estaba la Nilda al lado, que debía tener 23, 24 años, parecía de jardín de infantes, y estaba el tío Cámpora en la campaña del "Luche y vuelve" que se había largado en el '72.
Mirá vos, lo que son las vueltas de la vida, ¿no? Pero es la historia, es la historia de los argentinos. Y yo siempre digo que la historia podrá haber sido trágica o podrá haber sido tal vez equivocada, pero nunca es mala ni es buena, es la historia y hay que tomarla en su totalidad y en su contexto. ¿Y saben para qué? Porque el que no conozca la historia, difícilmente podrá comprender el presente y mucho menos construir el futuro, mucho menos. Conocer la historia es saber de dónde vinimos, porque si vos no sabés de dónde venís, difícilmente puedas decidir adónde querés ir.
Por eso digo que tengo tanta esperanza en todos ustedes, porque ustedes nacieron a la política en una Argentina diferente, en una Argentina en la cual se sintieron identificados con los que la gobernaban, que no era contra los que la gobernaban, no era contra nadie, era por algo, era por seguir profundizando, por seguir adelante, por más inclusión, por más transformación, por más patria, por más Argentina.
Y yo la verdad que si de algo debo sentirme orgullosa, es de haber contribuido también a lograr eso, a dejarles a mis hijos y a los hijos de mis hijos, un país mejor que el que los que me transfirieron pudieron construir. Y no es reproche, no es reproche, no es reproche.
Por eso, digo que tenemos que ser muy inteligentes, por eso digo que tenemos que unir esfuerzos los que pensamos igual. ¿O alguien puede estar en desacuerdo con la Asignación Universal por Hijo? ¿O alguien puede estar en desacuerdo con nuestro sistema jubilatorio ahora administrado por el Estado y no por los privados que estafaron al sistema y a los jubilados? ¿O alguien puede estar en desacuerdo en haber reestructurado la deuda externa de manera tal que pudiéramos pagarla y al mismo tiempo tener el crecimiento económico? ¿O alguien puede estar en desacuerdo con defender y proteger el trabajo y la industria nacional? ¿O alguien puede estar en contra de haber administrado de tal manera y de haber instalado un modelo económico que produjo una actividad que nos permitió recaudar impuestos que giramos a las provincias? ¿Alguien puede estar en desacuerdo en haber coparticipado por primera vez en todos los 200 años de historia un derecho de exportación como es el Fondo Federal Solidario de la Soja que llega a municipios y a provincias sin ningún tipo de distinciones? ¿Alguien puede estar en desacuerdo con haber destinado el 6,47 por ciento del PBI a educación como nunca se hizo en la República Argentina? Hasta el 2003 la Argentina destinaba solamente un 2 por ciento del PBI y un PBI por cierto bastante más chico que el actual a educación y casi un 6 por ciento al pago de la deuda. Ahora es exactamente al revés: hemos desendeudado totalmente el país y solamente se destina un 2 y un 6,47 a educación. ¿Alguien puede estar en desacuerdo de haber dado más y mejores derechos a todos, sin decidir sobre la vida de cada uno y decidir que cada uno puede decidir sobre su vida personal como tuvimos el orgullo el año pasado en nuestro Parlamento? ¿Alguien puede estar en desacuerdo con estas cosas?
Se podrá, tal vez, no haberle gustado su saco desabrochado o sus modales, pero creo que frente a todas estas cosas hay que hacer un fuerte ejercicio de imaginación para poder estar en contra o, simplemente, hacerlo por intereses personales o, tal vez, por intereses que tengan que ver con los que dominaron la Argentina hasta el año 2003.
Yo lo que quiero, porque estoy convencida, es que todos los argentinos o que la mayoría de los hombres y mujeres que habitan nuestro suelo, quieran vivir y seguir viviendo cada día mejor y hacerlo además, en un marco de democracia y libertad donde cada uno...
¡Ah!, ahí veo las netbooks, me había olvidado de las netbooks para todas las escuelas secundarias públicas de nuestro país. Netbooks...
Ustedes son la generación...Mirá el salto cualitativo que hemos dado en la Argentina. Si alguno iba a pensar en el año 2003 que íbamos a poder distribuirles a cada uno de nuestros chicos de las escuelas públicas secundarias una netbook para cubrir la brecha digital.
¿Estás transmitiendo con eso? Qué impresionante, yo no entiendo nada de eso pero me parece fantástico, soy de la generación de la LEXICON 80. Pero apuesto a ustedes, a los de la netbook, todas mis fichas están allí.
Por eso también queremos una industria cada vez con mayor y mejor valor agregado; por eso queremos unir nuestra industria con la ciencia y la tecnología, con las universidades. Porque ahora tenemos que lograr que durante tantos años estuvo un proceso de desindustrialización y que nosotros comenzamos a revertir en el año 2003, adquiera mayor entramado, mayor densidad para cubrir todos los eslabones de la cadena productiva y seguir generando más y mejor trabajo y menos vulnerabilidad externa.
Por eso, quería estar hoy aquí a la tarde, sé que estamos en veda electoral, así que no voy a anunciar nada.
Quería decirles también que quiero agradecerle a la cooperativa esta invitación y para finalizar déjenme decirles que quiero agradecerles a todos, a los que están acá adentro y a la misma cantidad de gente que ha quedado afuera y que no ha podido entrar, para ellos también un gran abrazo.
Para los cientos y cientos de chubutenses que me esperaron desde el aeropuerto hasta acá, para ese compañero que no sé quién es pero que era un compañero que tenía un cartel muy grande con su rostro y abajo decía "FAEP". Ustedes no deben saber, porque son muy jovencitos qué era FAEP. FAEP era una de las dos agrupaciones peronistas que había en la Universidad Nacional de La Plata en los años '70, era Frente de Agrupaciones Eva Perón. Él no militaba en esa, militaba en la otra, en la FURN, pero ahí estaba el compañero con mi cartera esperándome, dirigiéndome por esa historia y por tantas otras, no sé ni cómo se llama.
A las mujeres, a los chicos, quiero decirles que son ustedes los que me dan fuerza, que cuando siento que se me pone difícil, tomo contacto con todos ustedes y es como que viniera fuerza de otra parte.
Estoy segura que ustedes son el hilo conductor, la polea de transmisión que él me manda de algún lado para tener toda la fuerza que tengo que tener para seguir adelante, junto a todos ustedes, chubutenses, patagónicos, argentinos, hombres y mujeres que han recuperado la esperanza, las ganas de vivir y volver a creer en algo.
¡Qué importante es tener en la vida esperanza y creer en algo! Sigamos adelante, con fuerza por él y por nosotros mismos.
Gracias, Chubut; gracias, Comodoro, una vez más, muchas gracias. (APLAUSOS)
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Hay mucha gente que no está de acuerdo con lo que ella hace y realmente no sé cómo es vista en el mundo. Cuando viajé a Italia, me hospedé en uno de los mejores hoteles en florencia y pude dialogar con la clase media de allá. Ellos consideran que Cristina está haciendo una buena gestión.
ResponderEliminarSaludos
Mica